Los primeros 10 días
Como mamá primeriza has leído, visto y explorado mucho en Internet, para aprender todo lo que puedas, pero es posible que quieras tener un recordatorio cuando llegue el bebé.
Para ayudarte a empezar bien, hemos creado esta guía rápida para que tengas en cuenta los aspectos básicos sobre el cuidado del bebé:
Sostenerlo
Te puede parecer que tu bebé recién nacido es frágil y delicado, pero no tengas miedo de tocarlo, moverlo o sostenerlo. De hecho, los estudios muestran que los bebés que están en brazos más de 2 horas por día crecen mejor y lloran menos.
Como los músculos del cuello de tu bebé recién nacido no se han desarrollado aún, debes sostenerle la cabeza cada vez que lo alces. También tendrás que sostener su cabeza contra tu hombro o con la otra mano cuando lo lleves de un lado a otro.
Baño
Se recomienda realizar un baño de inmersión dentro de la habitación y con agua tibia a 36.5 o 37 grados de temperatura. Asegúrate de tener todos los productos para baño necesarios listos antes de bañar al bebé para que no te pierdas ni un solo momento de tu pequeño.
Cómo elegir los productos para tu recién nacido
Un producto ideal para bebé no debe irritar la piel ni los ojos, tampoco debe secar la piel del bebé ni modificar su pH natural. Es importante que lo guardes correctamente para ayudar a mantener la calidad del producto durante su uso normal.
Cambio de pañales
Muchos padres primerizos se sorprenden de la cantidad de pañales que el bebé usa por día. Para simplificarte la vida, asegúrate de tener una gran cantidad de pañales en casa antes de la llegada del bebé. También es muy útil aprender a cambiar el pañal del bebé con anticipación (¡y hasta practicar!).
Calmarlo
La mayoría de los bebés llora alrededor de 2 horas por día durante los primeros 3 meses. Si bien puede llegar a ser desconcertante, es algo normal.
Para poder calmar al bebé, primero debes identificar la causa de su incomodidad. ¿Tiene hambre? ¿Tiene gases? ¿Necesita que le cambies el pañal? ¿Es la hora de su siesta? ¿Está expuesto a ruido, luces o actividad excesivos?
Si tu bebé está expuesto a estímulos excesivos, para calmarlo debes sostenerlo contra tu hombro y mecerlo suavemente. Cántale o háblale dulcemente. Tranquilízalo con una voz suave. Puedes frotarle la espalda mientras lo haces. Cambia de posición hasta encontrar la que les resulte más cómoda.
Cambio de pañales
Muchos padres primerizos se sorprenden de la cantidad de pañales que el bebé usa por día. Para simplificarte la vida, asegúrate de tener una gran cantidad de pañales en casa antes de la llegada del bebé. También es muy útil aprender a cambiar el pañal del bebé con anticipación (¡y hasta practicar!).
Masajes para bebés
Investigaciones revelan que los masajes pueden relajar a los bebés, mejorar sus patrones de sueño y calmarlos cuando están irritados. Hacerle masajes a tu bebé también es una excelente manera de crear lazos afectivos con él y es muy fácil de hacerlo.
Alimentarlo
Muchos profesionales de la salud concuerdan en que lo mejor para tu bebé es la leche materna. En cuanto al aspecto nutricional, tiene todo lo que tu bebé necesita.
Por supuesto, algunas madres no pueden amamantar a su bebé por problemas médicos o por otras circunstancias especiales. Habla con tu pediatra para decidir cuál es la mejor manera de alimentar a tu recién nacido.
Sin importar con qué lo alimentes, asegúrate de sostenerlo siempre que lo hagas. Los abrazos asociados con la lactancia y la alimentación ayudan a crear un fuerte lazo de amor entre tú y tu bebé.
Sueño
La manera de dormir del bebé cambia a medida que crece. Los recién nacidos duermen mucho a lo largo de las 24 horas del día y se despiertan con frecuencia tanto de día como de noche. Pero puedes comenzar a crear una rutina a la hora de dormir para tu bebé, incluso a partir de las 6 a 8 semanas de vida.
En la medida que el bebé crece y comienza a consolidar su sueño durante la noche con algunas “siestas” durante el día, puedes ayudarle a desarrollar gradualmente un patrón de sueño en el que aprenda que de noche se duerme y no se juega.
Conoce más acerca de cómo ayudar a dormir a tu bebé con:
Los primeros 10 días pueden significar mucho más™
Para cuando tenga 3 años, el 85% del cerebro de tu bebé se habrá desarrollado. Cada experiencia hasta ese momento ayuda a formar el cerebro de tu bebé. Las experiencias multisensoriales repetitivas, constantes, predecibles y enriquecedoras pueden ayudar al desarrollo saludable de tu bebé.
Así que no te preocupes mucho de si estás haciendo “lo correcto”. Lo más importante es que pases mucho tiempo con tu hijo involucrando sus sentidos del tacto y del olfato, creando lazos afectivos entre ustedes dos mientras fomentas su crecimiento.